Tuesday, December 18, 2007

ESTRENO MUNDIAL DE "VS."

Interrumpimos la emisión para notificar a los interesados que el jueves, día 20 de Diciembre, se estrenará, en un ciclo especial del Zinebi, el corto "VS.", escrito, dirigido y montado por (y es por eso que cualquier metedura de pata en el mismo es culpa exclusiva de) vuestro gran amigo Ibai Canales.

Ander Pardo es Jon Blanco. Ya tienes una buena razón para ir al estreno: no cabrearle.

Por si a alguien le inetesan los pormenores del corto, es un thriller de tintes tragicómicos, en el cual, dos "profesionales" del crimen tienen que escoltar una misteriosa maleta del punto A al punto B. Sus peores enemigos serán su propia mala baba y el exceso de tiempo libre al volante.

Lo pasarán a eso de las 7:30, y se sabe que algunos de los actores pasarán por allí a firmar la ropa interior de sus fans.

Saturday, December 15, 2007

LA BESTIA Y EL JAPONÉS LOCO

Saludos, y bienvenidos al tercer post en el ciclo de "maestros" (sí, éste no empieza con una cita de Star Wars... aunque si lo hiciese, sería "su falta de fé resulta molesta"). En esta ocasión, os hablaré del escritor británico Shaun Hutson (del que quise haber hablado en mi anterior post, pero mi excesiva pasión por Barker me dejó sin espacio para hacerlo) y del director, guionista y actor japonés Shinya Tsukamoto.

Que empiece el baile.

SHAUN HUTSON: Alias "La Bestia" (mote que le he puesto yo, al menos). Británico, 49 años y tremendamente prolífico (escribe una media de dos libros anuales desde 1982, año en el que debutó con "Slugs").

Antes de que alguien me pregunte por qué me gusta La Bestia, quiero que cerréis los ojos y recordéis el trailer de "Machete", esa pequeña obra maestra que precedía a la no menos genial "Planet Terror". ¿Ya? Vale, abridlos. Y ahora imaginad alguien cuya obra literaria es prácticamente igual a ese trailer. Así es, amigos. Las novelas de Hutson son auténtico "grind house" literario. Terror bruto de serie B, con asesinos en serie que desmembran y devoran cadáveres, monstruos que brotan de orificios corporales y bebes mutantes; y thrillers policíacos con antihéroes cargados de armas de gran calibre, con poco aprecio por su propia integridad o la de terceras personas, y cosas que explotan por doquier (edificios, coches y cabezas incluídas).

¿Cómo puede ser malo un libro que tiene esta portada? ¿Eh? ¿Eh?

Por si todo lo anterior no hace que os pique la curiosidad acerca de este individuo, os diré que es la única persona que ha sido capaz de dejar mudo de horror al Gran Maestre Barker. Al parecer, durante una convención de escritores británicos de terror, Hutson le describió una escena de uno de sus libros, y era tan, tan burra que Barker sólo pudo tragar saliva y parpadear mientras encajaba los horrores allí narrados. Y es que, como ya he dicho, Clive es un romántico y un tipo sensible en el fondo. Hutson es una mala bestia.*

Como curiosidad, y para aquellos aficionados al jevi que leáis esto, os diré que uno de sus muchos trabajos antes de triunfar como escritor fue de "roadie" de (atención) Iron Maiden, con los que, al parecer, mantiene una muy buena relación, y con los que debe de haber aparecido en conciertos y saraos varios. Un auténtico hijo del metal, como dirían Gigatron.

¡Shaun también ha hecho cameos en películas, claro que sí!


Y ya como apunte final, antes de pasar a nuestro siguiente invitado, os invito a que busquéis en youtube los primeros episodios de "Garth Marenghi's Darkplace". Es una serie británica que parodia maravillosamente los tópicos del terror ochentero, y su protagonista, el desastroso y egocéntrico escritor conocido como Garth Marenghi (Matthew Holness) está, según dicen, inspirado en el mismísimo Hutson. Enjoy.

Y ahora...

SHINYA TSUKAMOTO: Ah, Tsukamoto. Un cineasta tokyota de 47 años que cogió "Eraserhead" y "Terminator" y las fusionó (nunca mejor dicho) en una salvajada titulada "Tetsuo the Iron Man". De estilo frenético y delirante, es uno de esos directores que son capaces de hacer que te olvides de la historia (que, por lo general, es bastante minimalista) y te quedes babeando mirando la pantalla, como si te hubiesen inyectado speed directamente al hipotálamo.

Suele tratar los temas de la alienación y la represión del individuo, y de la transformación de éste en otra cosa (ya sea una máquina de guerra biomecánica con cañones antiaéreos en el pecho, ya sea un boxeador, ya sea un pistolero) mediante el dolor y las experiencias traumáticas.

Y como lo que acabo de escribir suena muy gafapasta, os invito a que veáis "Tokyo Fist" y flipéis. La historia de un currito gris y apalancado en la rutina, cuya novia, cansada de él y de su sinsangrez, le abandona por un antiguo amigo suyo, que es ahora boxeador. El currito, interpretado, naturalmente, por Tsukamoto, se somete a un brutal entrenamiento para convertirse en una máquina de boxear imparable, partirle la cara a su antiguo amigo y recuperar a su novia. Por supuesto, nada le sale bien.

Este argumento, por el que yo no hubiese dado ni dos duros si lo hubiesen dirigido, por ejemplo, Michael Bay o Bryan Singer (¡morid!), se convierte, en manos de Tsukamoto, en un espectáculo hipnótico y barroco que te impide apartar los ojos de la pantalla durante los 75 minutos escasos que dura. Desde el punto de vista de un tipo que es escritor, director y boxeador, os digo que es acojonante.



Antes de que alguien quiera discutir la calidad de este señor, me parece justo advertir que es uno de los cineastas más plagiados de la historia. Stephen Norrington se inspiró en "Tetsuo 2: Body Hammer" para dirigir "Blade", y Jan Kounen, el artífice de la tremenda "Dobermann", hizo lo propio para su corto primerizo, "Vibroboy", y en menor medida, para la mencionada "Dobermann".

Y ya sabemos todos lo que pasó con "Blade" y "Dobermann", ¿no? Exacto: la trilogía de Matrix.

Tokyo Fist: "Fight Club" meets "Ranma 1/2".

*Qué le describió Hutson a Barker está descrito en detalle en varias webs. Cualquiera puede encontrarlo, pero por su cuenta y riesgo. Estáis avisados, almas sensibles.

Monday, December 10, 2007

"WRRRHHEEUNK"



Por petición especial de una amiga, vuelvo a usar una frase célebre de Star Wars para titular un artículo. Ésta vez, parafraseo a Chewbacca. Hala.



Bueno, había quedado en seguir hablando de mis maestros. Hoy os hablaré de



un simpático escritor que se hizo famoso allá por los ochenta y principios de los noventa. Hablamos de...



CLIVE BARKER: Este hombre, escritor, director, guionista y sabe Cristo qué más, es más conocido como el creador de "Hellraiser", la película que revolucionó el cine de terror en el ya lejano año de 1987. Lo cual no deja de ser irónico, porque la película trata de un montón de cosas que poco o nada tienen que ver con el miedo en sí.







Lo que es, ante todo, es un romántico empedernido. La gran mayoría de sus historias tratan sobre, o cuentan con, un personaje que busca un amor perdido. En Hellraiser, una mujer casada se encuentra con el cadáver reanimado de su antiguo amante y le ofrece sacrificios humanos para que pueda volver a vivir del todo, y los dos puedan así huir de una extraña cábala de seres extradimensionales que se dedican a "esculpir la carne" (y no, ni son "demonios" ni vienen del "infierno", eso se lo inventaron para las secuelas). Estos seres, conocidos como "Cenobitas", habían apresado al amante en cuestión años atrás, durante su búsqueda de la "experiencia definitiva".









Lo siento, chicas, está casado y además, es gay.








Pero bueno, el tema del artículo no es una sinopsis de la peli (que, por cierto, es altamente recomendable, si sois capaces de sobreponeros al chorreante gore de alguna escenas): Barker es un visionario en el sentido más amplio de la palabra. Las cosas que se le ocurren no se le ocurren a nadie más (a menos que, como en el caso del mencionado P.K. Dick, esté fuertemente drogado). Es especialista en crear mundos paralelos, cartografiar países inexistentes, descibrir tribus alienígenas con un sistema de castas y una religión perfectamente definidas, y todo ello coexistiendo con el mundo actual. Joder, si los de Marvel Comics hasta le dieron carta blanca para crear su propio sub-universo dentro de la cosmogonía marvelita (y es en serio, se sacó diez colecciones de cómics diferentes de la manga en poco más de un año).







Si Tolkien hubiese nacido en 1952, fuese un hombre homosexual con afición por el gore, el sadomaso y una fobia patológica al orden establecido, sería Clive Barker.






En mi caso, siendo poco más que un espermatozoide afortunado, aluciné con una historia que leí en los "Libros de Sangre" ("Books of Blood", leedlos YA) titulada el "The Yattering and Jack" (algo así como "el pequeño espíritu maligno y Jack", traducido libremente). La historia cuenta las desventuras de un demonio menor enviado desde el Infierno para enloquecer a un hombre y ganarse así su alma. El problema es que el Infierno tiene reglas estrictas y muy claras: el demonio debe permanecer invisible, no puede salir de casa del hombre en cuestion y no puede, bajo ningún concepto, ponerle la mano encima.


Lo bueno del asunto es que la historia está contada desde el punto de vista del demonio, y hasta te acaba cayendo bien (el tal Jack es una especie de Dalai Lama suburbano al que todo le resbala, y el pobre demonio las pasa putas). Moraleja: Canales aprendió que los malos son tan buenos protagonistas como los mismos buenos. A veces, hasta mejores. Esa filosofía me persigue a día de hoy, como ya habréis comprobado.










"Ángeles para unos, demonios para otros."








Para rematar, diré que lo que más me gusta de Barker, o lo que más me inspira, si lo preferís, es lo condenadamente multimedia que es. Si no escribe, dirige una peli (hasta ahora, ha dirigido tres). Si lo de dirigir no le convence, hace videojuegos (ha "diseñado" dos, con un tercero que fue cancelado). Y si no, bueno, resulta que el hombre también es pintor, y monta un par de exposiciones en la Tate de Londres o en Manhattan.



























Lo primero, es lo que pasa cuando le dejas a Clive un lienzo... Y lo segundo, lo que pasa cuando cuando le dejas un PC.










Chicos y chicas de Bellas Artes, ya os gustaría ser la mitad de productivos que Clive.

Sunday, December 09, 2007

"... PERO NO SE TE CONCEDE EL GRADO DE MAESTRO"

Esta es la frase freak que da comienzo al artículo, directamente extraída de el ataque de los clones. No es que me guste Star Wars (alguien ya se habrá dado cuenta), pero me parece un buen título. Y además, tengo una rara enfermedad neuronal que me obliga a memorizar y reproducir frases de películas. Así que demandadme, como dicen los yanquis.

Digo que lo considero un buen título porque la gente curiosa acerca de lo que hago va a poder conocer a mis maestros, la gente de la que he aprendido a poner burradas sobre papel. Y si no sois curiosos y os importa un pijo lo que escribo, bueno, podéis tomároslo como un número grátis del "qué leer".

Empecemos:


STEPHEN KING: El nombre le viene que ni pintado. King es el rey, ni más ni menos. El Elvis de la literatura fantástica del siglo XX. Mi primer contacto con la literatura fue "El Talismán", novela que coescribió Junto a Peter Straub, y que es algo así como el resultado de cruzar "El Señor de Los Anillos" con Charles Dickens y las películas ochenteras con niños tipo "E.T.".
Recuerdo el impulso atávico que me entraba después de leer unos párrafos del puñetero libro. Me entraba la necesidad enfermiza de robarle la vieja Brother a mi padre y llenar folios con sandeces acerca de tiranosaurios, guerreros sarracenos y demonios interdimensionales que conducían Cadillacs. Qué hermoso es ser joven.
El padre King te ama, hijo mío.


Aparte de su potencial adictivo, King tiene el honor de haber escrito el libro que más me ha asustado en la vida, que no es otro que "It". Los que no lo hayáis leído, habréis visto la peli, y sin duda, os acordaréis del monstruo primigenio comeniños que se escondía bajo la apariencia de un payaso de feria, y del miedo que daba el muy cabrón.


Como apunte final acerca de este gran tipo, que acaba de cumplir 60 y está hecho un torete, os diré que dirigió una película titulada "Maximum Overdrive", en la cual las máquinas cobraban vida misteriosamente y atacaban a los seres humanos, lideradas por un monstruoso camión con la cara del Duende Verde en el radiador (¡sí!) al ritmo de una banda sonora compuesta exclusiva y únicamente por AC/DC (¡¡sí!!).

Arrodilláos ante vuestro señor.

Bwahahahaha, hahahaha!!!

ERIC RED: Eric Red es un guionista y director de cine al que la vida no ha tratado muy bien. Destacó en los 80 escribiendo "The Hitcher (Carretera al Infierno)" (uno de los mejores y más brutales thrillers de carretera que he tenido la suerte de visionar) y dirigiendo "Cohen&Tate", la historia de dos pistoleros que se odian obligados a compartir misión y coche(*).

"Hola, soy Rutger Hauer y estoy en uno de los mejores finales de la historia de los thrillers"


Llegaron los 90, sus películas dejaron de molar y acabó en el pseudo-paro, teniendo que malvivir a base de escribir notas de producción para otras pelis. La suerte terminó de patearle las gónadas cuando tuvo un extraño y polémico accidente de coche en el que murieron dos personas y por el que casi acaba en el talego. Afortunadamente (no me meto en el tema de si el accidente fue o no culpa suya, o de si es un hijoputa o no, cosa que no tiene nada que ver con su talento como escritor o director), parece ser que vuelve a las palestra y ha anunciado tener un proyecto que está ya en postproducción: se llama "100 feet", y cuenta la historia de una mujer que mata a su marido maltratador en defensa propia. Lo cojonudo es que el juez le condena a una temporada de arresto domiciliario... en el apartamento que está ahora embrujado por el fantasma de su marido muerto. Ouhyeah!!

Por si esto fuera poco, en 2005 escribió ¡¡un cómic!!, publicado en España bajo el sello "Made in Hell", de Norma, titulado "Contención". Es la historia de unos astronautas que deben enfrentarse, en plena misión y a cientos de miles de kilómetros de la tierra, a un estallido de zombies provocado por el mal funcionamiento del equipo de soporte vital de la nave. Lo más claustrofóbico y malrollista que he leído en mucho tiempo.

Eric Red. Algunos dicen que se parece a mí. Discrepo, yo estoy más bueno.

Si alguien se pregunta por qué me gustan las películas de Red (como si se necesitasen más razones después de leer sus últimos agumentos, ¿eh?), os diré que, aparte de ser el hombre que me inspiró para escribir mi primer guión cinematográfico (se llamaba "a la caza" y lo parí con apenas 16), me parece un ejemplo perfecto de ritmo y tensión "in crescendo". La progresión del personaje principal en "The Hitcher", que se transforma de adolescente "cool" y majete en despiadado pistolero vengador, es algo que no he vuelto a ver desde entonces. La relación cada vez más deteriorada y violenta que se establece entre el veterano y gélido Cohen y el joven y psicopático Tate, que pasan de ser "coleguillas que trabajan juntos pero que no se llevan muy bien" a ser "archienemigos encarnizados", está tan jodidamente bien escrita que se me saltan las lágrimas.


Y quedan más. En el próximo post, hablaré de Clive "el romántico sanguinario" Barker y de Shaun "la bestia" Hutson, unidos ambos por su intrínseca "inglesidad" y su amor por las salvajadas gráficas.

*¿Que yo plagié esa idea para "VS."? Bueno, también la han plagiado los de Eidos para "Kane&Lynch", y no veo que os quejéis...